Molde/molde de inyección de plástico para mascarilla de anestesia

Una máscara de anestesia, también conocida como mascarilla facial, es un dispositivo médico que se utiliza durante la administración de anestesia para administrar gases anestésicos al paciente. Cubre la nariz y la boca del paciente y se ajusta firmemente a su rostro, creando un sello hermético. La máscara de anestesia se conecta a una máquina de anestesia o a un circuito respiratorio, que administra una mezcla de gases, incluyendo oxígeno y agentes anestésicos, al paciente. Garantiza que el paciente reciba la cantidad necesaria de oxígeno y agentes anestésicos durante procedimientos quirúrgicos o médicos, manteniendo la vía aérea permeable. La máscara suele estar hecha de materiales transparentes, suaves y flexibles que se adaptan al rostro del paciente para mayor comodidad y un sellado eficaz. Tiene una correa ajustable que rodea la nuca del paciente para mantener la máscara en su lugar. Las máscaras de anestesia vienen en diferentes tamaños para adaptarse a pacientes de diversas edades y tamaños, desde bebés hasta adultos. Hay máscaras pediátricas disponibles para niños pequeños y bebés. Algunas mascarillas también pueden tener características adicionales, como un balón inflable para un mejor sellado. El uso de una mascarilla de anestesia es un método común para administrar anestesia y se utiliza a menudo durante la inducción, el mantenimiento y la recuperación. Permite al anestesiólogo o anestesista monitorear de cerca la respiración del paciente, administrar medicamentos según sea necesario y realizar los ajustes necesarios para garantizar su seguridad y comodidad. Es importante destacar que el uso de una mascarilla de anestesia debe ser realizado por profesionales de la salud cualificados y capacitados en la administración de anestesia. La selección y aplicación correctas de la mascarilla son fundamentales para garantizar su eficacia y la seguridad del paciente.